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Cómo se vivie un intensivo

DANZAS ORIENTALES MAESTRA MARYAM

NOTAS EN TORNO AL TALLER INTENSIVO

EL PRÓXIMO PASO: ELEVA TU NIVEL.

Ciudad de México. Agosto 2013.

                      PAKO (Francisco Villalpando Sánchez)

 

PRIMER DÍA:

 

Inicia una página nueva en la vida de las Maestras y Bailarinas asistentes al Taller Intensivo impartido por la virtuosa Maestra Maryam; y como todo inicio se aprecian en ellas cuerpos inquietos, movimientos llenos de energía, elegancia, belleza, nervios, incertidumbre. Dispuestas a retomar el camino del aprendizaje, dispuestas, con humildad, a superarse. Grupo diverso, inquietudes a flor de piel, Maestras y Bailarinas dispuestas, como esponjas marinas, a absorber todas las enseñanzas, Maestras y Bailarinas en busca de superación.

El primer reto, la primera huella del Taller Intensivo es mostrarse a si mismas, a la Maestra y a las compañeras su propia coreografía.

Los rostros de las Maestras y Bailarinas se concentran no sólo en la interpretación de las coreografías, evocan su propia coreografía; esperan las observaciones y comentarios de la Maestra Maryam.

En estos momentos todas son iguales, todas son alumnas, todas son discípulas, hay una sola Maestra.

 

 

SEGUNDO DÍA

 

La Maestra inunda el espacio con sus movimientos, la sala se ilumina, un Sol rodeado de Lunas, de Lunas que en sus espacios ya son Sol con sus propias Lunas, sus alumnas, que también ahora son lunas y mañana serán soles.

La Maestra desarrolla una coreografía con el ritmo del SAMAI llena de belleza, suavidad, sutileza; las Lunas atraídas e impulsadas por el Sol llenan el espacio de trabajo, armonía, elegancia, precisión.

Breve descanso y se retoma el trabajo del Intensivo con uno de los momentos más complejos, delicados, riesgoso, tal vez hasta “peligroso”: el encuentro y enfrentamiento con sí mismas.

La Maestra acompaña a cada una, las voces en alto, las sonrisa nerviosas, el silencio; son algunas características que se aprecian en ellas.

El silencio, lo no dicho se hace presente en varios rostros, los recuerdos en este momento hacen acto de presencia, el silencio habla.

Sin embargo, hay esperanza, la Maestra avienta el salvavidas, guía para salir adelante.

 

 

TERCER DÍA

 

Continúa el encuentro con sí mismas a través de la coreografía propia; la Maestra realiza observaciones personalizadas, concentración en los movimientos, Danza para sí mismas, expresiones con tensión, nerviosismo; nervios propios, control de nervios a pesar de la presión, nervios superados. El sí mismo retorna, retoma confianza, los movimientos se tornan conscientes, se controlan, fluyen, se hacen naturales; la coreografía se transforma en Danza, Danza que es Arte; que es propia y es también de quien la aprecia el Arte, de quien aprecia la Danza. Los movimientos permanecen en el cuerpo propio, pero la Danza los desborda, la Danza los lleva al exterior, fluye hacia los otros y son inundados por la Danza, en este momento la Danza transforma en cuerpo, el cuerpo se transforma en Danza.

La transformación de la Danza propia en Arte tiene dos acompañantes vitales: el trabajo propio y la guía precisa de quien tiene ya en sí y para sí el Arte de la Danza, la Maestra.

La Maestra que da indicaciones encaminadas para hacer que la Danza salga de sí mismas y llegue a los otros como Arte a través del escenario. Llegue a los otros para lograr la conjugación artística, para que la Danza sea por  fin mía, tuya, nuestra.

La Maestra reflexiona, reflexiona los movimientos y entonces se acerca, comenta, platica, indica, explica, acompaña, encamina.

 

CUARTO DÍA

 

El trabajo continúa aunque el cansancio aparece entre las participantes, el cansancio va cobrando su cuota, algunos dolores corporales, resfríos… sin embargo, la necesidad de desbordar, la necesidad de superarse es más fuerte que el cansancio, es más fuerte que el dolor.

Ahora corresponde reconocer los puntos fuertes de cada una; cada una tiene sus características propias, cada una es única, y justo eso se tiene que explotar, pero no sobre explotar. El trabajo se encamina a la superación continua ya que siempre es necesario aprender algo más:

“La perfección está en la imperfección “.

Para que haya una transformación tengo que buscar lo imperfecto.

La Maestra encamina este proceso de transformación acompañada de la música del Baladi la indicación es ir soltando las manos con movimientos suaves, tratando de emular a las mujeres egipcias quienes no desarrollan una técnica ya que viven e interpretan de manera natural sus movimientos.

Las alumnas se retoman como Bailarinas, se disfrutan, hacen que el grupo disfrute su baile, el baile se torna en alegría, el grupo se transforma en alegría.

El ejercicio se transforma en una gran Hafla

La sonrisa hace su aparición en cada uno de los rostros, la sonrisa no es parte de una actuación, la sonrisa es natural, la sonrisa inunda cada uno de los rostros, la sonrisa se hace sinónimo de confianza, sinónimo de naturalidad.

 

 

 

QUINTO DÍA

 

Preparación intensiva para la presentación, nuevamente nervios pero ahora acompañados de concentración, de aprendizajes nuevos, de experiencias nuevas, de caminos y posibilidades nuevas. La Maestra acompaña con miras a verlas volar, con miras a presenciar mayores logros en cada una de ellas. Sus ahora alumnas volverán a sus espacios, retomarán su presencia como Soles.

La Maestra muestra por un instante a través de su Danza todo el brillo de su experiencia, de su sabiduría, de su presencia, su elegancia, su precisión, pero también de su alegría, su deleite, su capacidad de compartir, de su humildad y generosidad, mostrada antes durante y ahora al concluir este espacio intensivo de preparación.

Maryam, Maestra gracias por tu entrega, por tu apoyo, por tu cariño, por tu generosidad, por tu atención.

Gracias Maestra, Gracias Compañeras, por esta oportunidad, por permitirme compartir esta experiencia inolvidable, engrandecedora, enriquecedora.

Gracias a nuestra Organizadora y todo su equipo de trabajo.

Hasta muy pronto, hasta ahora, hasta siempre.

 

 

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